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Por ahora no ha habido encontronazos serios en el heads-up, por lo que el factor que más ha influido hasta ahora en este duelo final ha sido la subida de ciegas a 15.000/30.000, que reduce las ciegas en juego.

Los jugadores empezaron muy igualados esta recta final, alrededor de los 1.650.000 puntos por cabeza, así que entre los dos suman ahora poco más de 100 ciegas.

Brzeski aguantó con su decenita de ciegas durante un buen rato hasta que Roset abrió un K9 desde el botón y Brzeski decidió resubir con A8.

Abrir esa mano para tirarse ante el polaco no sería demasiado acertado, así que el call acabó llegando tras unos momentos de reflexión.

El flop añadió varios outs a la mano de Roset, Q8J, y el turn le puso por delante con un 9. Brzeski ya vio caer el 3 del river enfilando hacia la salida del set de televisión.

Mats Eriksson intentó poner a trabajar su recién adquirido bigstack casi de inmediato.

En cuanto Brzeski dejó pasar una mano sin pushear sus últimas ocho ciegas y Roset abrió el bote, el sueco vio la posibilidad de aprovechar el coste de confrontación que debía atenazar al español para echarle de la mano.

Primero resubió con 64 y Joel pagó con su AJ. El flop le dio un proyecto de escalera interna al sueco y pareja máxima a Roset, J37. El español intentó acabar la mano ahí resubiendo la continuación del sueco. Eriksson no quiso dejar de meter presión y declaró

La mano, que se mantuvo controlada durante el preflop, se desató en cuanto cayeron las primeras comunitarias.

Mats Eriksson llevaba AK y Brzeski AQ. Con solo tres jugadores vivos, normalmente esta mano acabaría all-in, pero la presencia de Roset con el menor stack de los tres en la mesa seguro que tuvo que ver en la decisión.

El flop fue AQ6 y Eriksson dejó tomar el papel de agresor al polaco. el trun fue una J y se formó un bote cercano al millón de puntos cuando cayó un K en el river y Brzeski fue all-in.

El call de