Iván Lucá: “Intentamos jugar de la manera más justa”

Ayer, os contábamos con incredulidad un hecho que desconocemos si tiene precedentes en el poker moderno, pero que los tenga o no, nos pareció de una particularidad fuera de toda duda.

Iván Lucá, un jugador ya conocido en el circuito internacional y quien lleva cosechados grandes resultados durante el último año y medio, ganaba el Eureka Poker Tour de Rozvadov. 

Hasta aquí, podríamos considerar algo dentro de una relativa normalidad, no en vano Lucá se ha ganado ya un prestigio tanto por su perfil en vivo como por sus grandes resultados en las mesas online. Lo particular de la historia fue a quién se tuvo que medir “Negriin” en el heads-up. En frente tenía, ni más ni menos, que a su novia, Maria Lampropulos.

Que una pareja sentimental llegue a la mesa final de un torneo de más de 600 jugadores, es a tener en cuenta, pero que además se citen en el heads-up, garantizando así que alguno de ellos se llevaría el título, es algo que no sabemos si ha sucedido con anterioridad.

En cualquier caso, no es de extrañar que principalmente la comunidad argentina y la de habla hispana en general, quisiera saber las impresiones de estos felices protagonistas. Por ese motivo, los amigos de CodigoPoker contactaron con Iván y María al acabar el torneo, para arrancarles algunas declaraciones.

Iván reconoce que “es algo muy sick, muy difícil, algo que posiblemente no podamos volver a repetir” y con razón. No todos los días se ingresan casi 200.000€ entre uno y otro miembro de la pareja.

Evidentemente, los amigos de CodigoPoker no podían dejar pasar la oportunidad de preguntar a los protagonistas sobre el ambiente que se respiraba en la mesa final, sabiendo que ambos jugadores eran pareja sentimental. ¿Soft play? ¿Colussion? Aparentemente, nada de eso.

Fue una situación particular para todos. En mi caso, los jugadores ya me conocían, había cierto respeto; y Connie (como a María le gusta que le llamen) se hizo conocer y se lo ganó también. No fue una sorpresa que entrásemos en la mesa final primer y tercero respectivamente.

Obviamente que tuvimos todos los ojos encima, es una situación muy difícil. No queríamos eliminarnos entre nosotros, pero tratamos de jugar de la manera más justa posible y hacer el juego lo más natural… Tuvimos los ojos encima no solo de los jugadores, sino del director, del floor y de PokerStars, pero no hicimos nada mal.

María, por su parte, tampoco dejó pasar la oportunidad de realizar sus propias declaraciones, no en vano el 50% del protagonismo de esta historia, le pertenece de propio derecho. 

Estoy súper, súper feliz, muy pero muy contenta. Realmente fue sumamente complicado. Iván es un jugador muy agresivo, que no te foldea nada, que quiere jugar todas las manos. Sé que es un jugador muy superior a mí. Si hubiese sido en otras circunstancias, no me hubiera convenido enfrentarme a un jugador así. Me ubiqué en el lugar que me correspondía y por suerte salió todo muy bien. Probablemente es algo que nunca se vuelva a repetir, pero aunque haya sucedido solo una vez, estamos sumamente satisfechos.

No es para menos….