Jean Gaspard intentó llevarse todas las fichas en el día 3

El día 3 del WPT Borgata Poker Open fue de mucho trajín para jugadores y personal, a los que se les exigió recortar la cifra de 150 participantes que se presentó a primera hora hasta los 27 que iban a ocupar las tres últimas mesas.

La dictadura del reloj se relajó tras ocho niveles de 90 minutos de duración, y se hizo la vista gorda cuando aún quedaban 31 de ellos en pie.

Tan drástica reducción incluía decidir el nombre de los 120 jugadores con derecho a cobro en el torneo. El ex-jugador de baloncesto Malik Rose fue de los que se quedó fuera, forzando la máquina con 88 de mano en un board doblado KK6QT. No se creyó nada en el flop y atacó las dos siguientes calles hasta acabar all-in. Su oponente llevaba el tercer rey.

Sí entraron en el dinero el actual Player of the Year del circuito Mukul Pahuja (104º), el ex-November Nine Russell Thomas (86º), el presentador del WPT en televisión Mike Sexton (85º), Byron Kaverman (64º), John Racener (62º), y el campeón al que dará relevo Andoni Larrabe en el Main Event de las WSOP Ryan Riess (39º).

Reiss fue una de las nuemerosas víctimas de un jugador al que todo el mundo en Las Vegas conoce como “El Príncipe”.

Jean Gaspard es uno de esos típicos jugadores estadounidenses acostumbrados a recorrer el Strip de arriba abajo en busca de los torneos de buy-in medio donde se ganan la vida, pero que nunca han destacado en una cita importante.

Su único título digno de mención en una década de presencia en el circuito estadounidense es un anillo del WSOP Circuit ganado en 2009, aunque 2014 puede ser un año muy especial para él.

En junio logró su primera mesa final de las WSOP, y parece realmente complicado que se le escape otra más en este WPT Borgata Poker Open. Gaspard es el chipleader de cara a los dos últimos días, con casi cinco veces la media y doblando al segundo, Blake Bohn. 

Bohn terminó el día 2 en primera posición y provocó cierta preocupación en el descanso que tocó justo después de romper la burbuja. Tuvo que ser retirado en silla de ruedas por el personal médico del Borgata debido a un desvanecimiento, pero no llegó a perder la consciencia y se reincorporó con normalidad al torneo después de comer un poco.

Mañana estará como una rosa para pelear por un sitio en la final contra el doble campeón del WPT Cornel Cimpan, Darren Elias, Justin Zaki, Barry Shulman, Erik Cajelais, y Matt Glantz, que además de jugar en casa y tener premio asegurado, ya se ha llevado un souvenir del evento. 

A Glantz le salvó un river de ser eliminado a mediados de jornada, pero no uno cualquiera, sino uno que le completaba la escalera real. Mientras recogía las fichas le preguntó a un floor “Eh, ¿y por hacer escalera real no me dan nada?”. El personal, siguiendo la broma, sacó una camiseta para Matt.

Quien no llora, ya sabes.