WSOP #52: Steve Sung le arrebata el brazalete a Phil Galfond

Por mucho que al final, todos ellos repartan un brazalete de oro de iguales características (a excepción del Main Event), es evidente que hay eventos que crean mayor expectación que otros, y que su ganador, aunque sea involuntariamente, se llevará mayor parte de fama y prestigio que otros galardonados.

Eso es lo que sucederá con Steve Sung, el jugador que esta mañana se ha coronado como campeón del Evento #52: 25.000$ NL Hold'em (Six-Handed), en uno de los torneos más duros y prestigiosos del calendario de las WSOP, y que además reunió un field realmente importante.

Jugadores de la talla de Dan Smith, Joe Cada, Jason Mercier, Brian Hastings, Tom Marchese, Taylor Paur, Dan Kelly o Ben Tollerene pusieron a prueba sus opciones, sin ninguno de ellos conseguir colarse en los solo 18 puestos que había reservado la organización a plazas pagadas.

Ayer, cuando se retomaba la acción en la última jornada de juego, eran precisamente 18 los aspirantes que volvían a las mesas del Rio con intención de luchar por los más de 1.200.000$ que se llevaría el ganador.

Entre ese reducido colectivo se encontraban jugadores sobradamente conocidos. Es el caso de Marvin Rettenmaier (16º.), Igor Kurganov (11º.) o Shannon Shorr (7º.), todos ellos eliminados antes de que se alcanzara la mesa final.

Una vez ya llegados a ella, la eliminación de Richard Lyndaker sirvió de antesala para que llegara la del alemán Max Lehmanski, quien hasta ese momento había realizado un torneo inmaculado, liderando las dos primeras jornadas de competición. Al final el teutón se tuvo que conformar con 249.921$ de premio, que no está nada mal.

Tras él cayeron Stephen Chidwick y Dani Stern antes de que se llegara al heads-up definitivo que midió a Steve Sung con Phil Galfond.

Ambos buscaban así su segundo brazalete de su cuenta particular y lo cierto fue que antes de que Sung se llevara el gato al agua, los dos tuvieron opciones de sentenciar el torneo.

El cara a cara comenzó con clara ventaja para Sung, pero Galfond, experimentado jugador de heads-up, consiguió darle la vuelta al marcador, logrando una cómoda ventaja sobre su rival.

Pero al final esa ventaja no se materializó en triunfo, al revés. Galfond se dejó comer la tostada, hasta que llegó una mano cruzada en la que ambos restos acabaron en el centro del tapete.

Sung se había puesto ya con ventaja de 4:1, cuando antes de las cartas comunitarias, Galfond movió su resto al centro de la mesa con  KsQh y Sung decidió pagarle con la perla:  JcTd. Aún e ir por delante, a Galfond no le valió con ligar top-pair en el flop para sobrevivir en el torneo. Las tres primeras cartas en forma de  KdThJh daban un poco a cada uno, aunque obviamente, más a Sung a quien esas dobles parejas, le valieron para ganar el torneo.

Steve Sung conseguía así su segundo brazalete de las WSOP, privando a Galfond de hacer lo mismo. En cualquier caso, el premio que se lleva, seguro que sirve para pasar el mal trago.