Probabilidades Implícitas, escribe Andy Bloch

La mayoría de las personas tiene buen conocimiento del cálculo de las probabilidades del bote (pot odds) pero no se dan cuenta de que este cálculo resuelve sólo una parte de la ecuación en póquer. A menudo, estos jugadores olvidan pensar en cómo se desarrollará el resto de la mano si es que igualan la apuesta, y olvidan integrar ese factor en el cálculo. Aquí es cuando las Probabilidades Implícitas (implied odds) entran en vigor.

En resumen, las probabilidades implícitas son una manera de calcular la cantidad de dinero que podrías ganar si logras formar tu mano. Poniéndolo de otro modo, tus probabilidades implícitas son la cantidad que podrías ganar dividido la cantidad que estas poniendo en el bote.

Por ejemplo, tienes ^7d ^8d en el turn, y dos diamantes en la mesa. Hay 1.000 fichas en el bote y tu oponente apuesta 500. Estás casi seguro de que tu oponente tiene un par alto y no está en un proyecto de diamantes, entonces, conseguir simplemente un 7 u 8 no es suficiente. Eso nos deja con nueve outs para tu proyecto de color. Necesitas unas probabilidades del bote de 4:1 para igualar la apuesta pero sólo tienes 3:1.

Ahora, si tu oponente tiene más fichas enfrente, y crees que te pagará si logras tu proyecto, las probabilidades implícitas entran en juego. Digamos que tu oponente pagaría al menos el bote – 1.500 fichas en este caso – cuando consigas tu mano. Estás pagando 500 para hacer 3.000, unas probabilidades implícitas de 6:1. Más que suficiente para justificar el intento.

Mientras que tus probabilidades implícitas totales pueden ser más altas si estás jugando Pot Limit o No Limit, el concepto de probabilidades implícitas a menudo tiene más relevancia en Limit, donde generalmente puedes determinar cuan probable es que puedas exprimir una o dos apuestas más de tu oponente en el river. En Pot Limit y No Limit, muy a menudo no tienes la menor idea del tamaño al que el bote llegará, o, siquiera, si tu oponente apostará.

Como en todos los juegos de póquer, tus probabilidades implícitas en cualquier mano también están influenciadas por tus oponentes. ¿Es un jugador débil? ¿Tight? ¿Igualará una apuesta en el river con top pair y un kicker débil o una segunda pareja? Debes utilizar tu lectura del estilo de tu oponente para que te ayude a determinar el pago potencial de la mano. Vas a tener que estimar la cantidad de fichas que tu oponente estará preparado a comprometer en la mano, pero puedes hacerlo en base a tus experiencias anteriores con ese jugador.

Las probabilidades implícitas son mucho más complejas que las probabilidades del bote. No sólo debes pensar en la mano que tienes en ese momento y en las probabilidades que tienes, sino también pensar en cómo se desarrollará la mano en todo aspecto. Ésa es la diferencia entre probabilidades implícitas y probabilidades del bote. Cuando lo llegas a comprender y manejar, es un concepto poderoso.

Analicemos algunos de los conceptos más avanzados relacionados con las probabilidades implícitas, junto a algunos de los errores más comunes que muchos jugadores cometen al aplicar de forma incorrecta estas reglas.

Estimando Probabilidades Implícitas: Uno de los errores más comunes que cometen muchos jugadores es sobreestimar sus probabilidades implícitas en una mano determinada. Por ejemplo, en la primera temporada de Poker After Dark, un pro muy conocido (algunos pueden creerle engreído), pagó una apuesta muy grande que yo hice en el turn con nada más que un proyecto de escalera interna. Pensó que yo nunca lo pondría en una escalera si conseguía su mano, y que le pagaría en el river si salía uno de sus cuatro outs.

Aunque en teoría pudo haber hecho lo correcto, todavía cometió un error muy grande al pagarme la apuesta en esta mano, porque aunque todas mis fichas acabaran en el centro, él no lograba las probabilidades correctas en ese bote.

Miremos los números, para ver mejor lo que quiero decir. Mi oponente estaba buscando cuatro cartas para completar su mano, lo que significa que únicamente tenía un 9% o 10% de obtenerla. Esto significa que necesitaba unas implied odds de al menos 9:1 o 10:1 para justificar su movimiento, porcentaje que, basado en la cantidad de fichas que me quedaban a mí, él no estaba ni cerca de obtener.

En general, las probablidades implícitas no van a ayudarte si estás buscando cuatro o cinco cartas para lograr tu mano. Idealmente, en una mano cualquiera deberías tener nueve o más outs que puedan completar tu mano, antes de preocuparte por las probabilidades implícitas.

Equivocarse al Calcular Probabilidades Implícitas: Uno de los errores que veo más a menudo es cuando los jugadores piensan que están obteniendo probabilidades implícitas, pero se equivocan. Por ejemplo, digamos que hay dos jugadores involucrados en una mano, y uno de ellos presiona yendo all in en el turn. El segundo jugador tiene un proyecto de color, o de escalera, y paga la apuesta.

Si las probabilidades del bote son correctas aquí, es una buena decisión. Pero si las probabilidades del bote son malas, también lo es la decisión, porque no hay más fichas yendo al bote en el river, lo que significa que las probabilidades implícitas simplemente no existen en esta mano. Al cometer el error de no distinguir la diferencia entre probabilidades del bote y probabilidades implícitas, muchos jugadores experimentados terminan poniendo sus fichas en riesgo más seguido de lo que deberían.

Telegrafiar Tu Mano: Hay muchos momentos en que los jugadores calculan correctamente sus probabilidades implícitas en una mano, y también correctamente igualan una apuesta, sólo para encontrarse con que nadie les paga a ellos cuando logran su mano. ¿Te preguntas por qué? La respuesta es simple: telegrafiaron sus manos.

No tiene nada de malo tomarse el tiempo necesario al enfrentar una decisión difícil en una mano. Sin embargo, debes recordar que cuanto más tiempo te tomes para decidir lo que vas a hacer, más información puedes estar dándoles a tus oponentes sobre tus cartas. Digamos que te tomaste tu tiempo al igualar una apuesta en el flop, y luego juegas rápido cuando la tercera carta de un palo llega en el turn. Las mayores posibilidades son que tu oponente se vaya al mazo asumiendo –y probablemente sin equivocarse– que haz hecho color.

Si tu juego en una mano parece obvio, probablemente lo es; lo que significa que, para empezar, las probabilidades implícitas que pensabas tener después del flop probablemente nunca existieron. En sentido práctico, esto significa que deberías considerar el estilo de tu oponente como un factor más en la ecuación cuando calcules tus probabilidades implícitas en una mano. Si es loose, tus probabilidades serán mucho mejores que si es tight.

Proteger Tu Mano: Debes aprender a proteger tu mano contra oponentes que vayan en busca de sus proyectos. Limita tus apuestas a la mitad del bote para asegurarte de que no les estés dando las probabilidades correctas para que te igualen. Si te pagan, y una carta peligrosa llega a la mesa, aún puedes negarles sus probabilidades implícitas al pasar o tirar tus cartas si tu oponente ataca con una apuesta.

Atención a las Probabilidades Implícitas Negativas: Este es uno de los conceptos más importantes y difíciles de comprender. Probabilidades implícitas negativas significa que debes estar preocupado por conseguir tu mano, y también pagarle a un oponente que puede lograr una mano mejor que la tuya. Si apuestas luego de hacer color con Jack alto y tu oponente sube la apuesta detrás tuyo, quizás tengas que pagarle aunque creas que su color es más alto. Un manera de manejar esta situación, y minimizar tus perdidas potenciales, es pensar en el bote total como si valiera un poco menos de lo que en realidad vale antes de considerar pagar la apuesta. Si las odds no justifican, procede con cautela.

Dominar los diferentes matices de las probabilidades implícitas toma tiempo y práctica, pero, a la larga, el dominio de esta parte del juego vale el esfuerzo. Comienza a pensar y considerar lo que potencialmente suceda unos pasos más adelante en una mano, antes de comprometerte temprano en la acción, y estarás bien encaminado al próximo nivel.