El juego como adicción

Greg Hogan Jr. era el presidente de su clase en la universidad y ayer fue condenado a pasar de 22 meses a 10 años en prisión por robar un banco para poder mantener su adicción a las apuestas online, cuenta La Vanguardia.

El joven, de 20 años, estaba enganchado a los juegos de póquer por Internet, en los que gastaba cientos de dólares.

Su declaración de culpabilidad ante la acusación de robar un banco pone de manifiesto la problemática de la creciente popularidad de las apuestas online entre los jóvenes estudiantes universitarios.

Hogan, hijo de un ministro baptista de Ohio, cursaba su segundo año de estudios en la universidad de Lehigh cuando entró en una sucursal bancaria en Allentown el 9 de diciembre, y, tras entregar una nota al cajero y amenazarlo, escapó habiendo robado 2.871 dolares.

¿Tenemos todo bajo control cuando apostamos, tal como pensamos? ¿Nos cuidamos de no acercarnos a esa línea roja que separa a una actividad sana y proveedora de divertimento de aquella que es sólo el ganar más y más? Todos atravesamos tarde o temprano por momentos donde queremos jugar más porque nos ha ido bien o porque queremos recuperar lo perdido. Tiene sentido en una actividad donde el éxito se mide por el dinero ganado.

La Asociación de Jugadores Anónimos provee un pequeño test de 20 preguntas para conocer si estamos teniendo problemas con el juego, e informa también de programas para salir de una adicción al juego, puesto que es una enfermedad que requiere tratamiento. También dispone de una selección de preguntas y respuestas muy interesantes que informan sobre el juego compulsivo.

Es una lectura que viene bien a todos, aunque no exista el problema, puesto que nos pone en guardia y nos informa, además de darnos herramientas para actuar si tenemos un familiar o amigo con ese problema.