Historia curiosa la que nos hemos encontrado en este sexto nivel, último de registro. Óscar Royuela estaba quemado. No había ganado una sola mano en todo el día y acababa saltando por los aires de bad beat. Pero el destino -por llamarlo de alguna manera- ha considerado que tiene que estar en el torneo, al menos, otro rato.
Óscar enfilaba la zona de fumadores dándole vueltas a la cabeza. Dentro, buscando una suerte esquiva en las mesas, se jugaba 20€ en una máquina de Slots, más conocida como "tragaperras". Normalmente no hubiera pasado de un jugador más que sale eliminado, pero ¿por qué ibamos a estar contando esto?
A Óscar se le ecnedieron la luces de la máquina y empezaron a salir monedas de la