Para muchos, Phil Ivey sigue siendo, y posiblemente lo será por muchos años, el mejor jugador de poker de todos los tiempos, si bien es cierto que, como a muchos les sucede en la actualidad, su aclimatación y adaptación al estilo de poker moderno, por lo menos en las mesas virtuales, se está poniendo en duda vistos sus resultados al enfrentarse a jugadores de la “nueva escuela”.
Hasta hace poco, Phil Ivey podía presumir de ser el jugador con mayores ganancias de la historia en las mesas “nosebleeds”, o lo que es lo mismo, las mesas de límites más altos