WSOP 2018

Y es que las cosas no pintaban bien para el campeón del mundo de 2009. Su stack fue cayendo hasta que con apenas 17 ciegas decidia hacer un 3bet allin con  Ah6h y mucho corazón.

Había abierto la mano un sólido Frederick Jensen, que ante la opción de cargarse a un rival no pensaba demasiado en pagar con su  AcTh. Llevaba a Cada dominado y ya pensaba en lanzarse a la caza del líder.

Pero para ganar el Main Event es necesaria una pizca de suerte en el momento adecuado. Este lo era para un Cada que flopeaba un proyecto de color y escalera en  5h3h2s que acabarían

No ha pasado demasiado tiempo desde la última eliminación. Todavía con la pistola caliente y una racha soñada, dejaba en la cuneta al que fuera verdugo de Vicent Boscá.

Open Push de 21 ciegas con  KcQd en el botón y, cómo no, Michael Dyer se despertaba con un  AhQh que sería decisivo.

Las comunitarias no prestaban ni media ayuda y Dyer sigue recogiendo fichas en un día que tardará mucho en olvidar. El run es completamente desmesurado. Tiene casi 90.000.000 de puntos a falta de 15 jugadores, cuadruplicando la media y con el mazo preparado para el que ose quitarle puntos.

Por fin un short es capaz de ganar un flip. El protagonista ha sido Konstantin Beylin. Sus  8c8d aguantaban contra el  AdQs de un Zabian que está en caída libre.

El que fuera verdugo de Samuel Bernabéu s eha dejado ya dos tercios del stack que embolsaba anoche y tendrá que revertir rápido la tendencia si no se quiere ir mucho antes de los esperado en este día 7.

Por su parte, Beylin alcanza los 12.200.000 y se sitúa en la zona tranquila de la clasificación.

Se había quedado con apenas 6 ciegas y media y tenía que moverse cuanto antes. En una de las primeras manos que le llegaba limpia, levantaba  Qd8d y decidía que era suficiente para meterlas al centro.

Las malas noticias venían por detrás. Su compatriota Zhu pagaba el allin, pero la acción no pararía ahí. Frederick Jensen, o Brick, que le han puesto en la televisión, se colaba en la fiesta de los chinos y anunciaba allin por 7.380.000 puntos más de 24 ciegas y  9h9c en sus manos.

Zhu pensaba, y pagaba, poniendo en riesgo a los dos jugadores, pero neceistaría conectar su  AsQh. 

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