Alexander Millar "Kanu7": ascensión a la cumbre

El nuevo cortometraje sobre los Team Online de PokerStars es uno de los más esperados: el del jugador de high stakes Alexander Millar “Kanu7”.

El británico juega en los niveles más altos de su especialidad, el No Limit Hold’em, y es uno de los más queridos por el raíl por su participación en los foros, su humildad y su respeto al poker.

El que espere ver fiestas VIP, coches de lujo y viajes en jet privado se va a llevar una desilusión, aunque las ganancias de Alex superan los 7.000.000$. Ni él es aficionado a ese estilo de vida ni se relaciona con el tipo de gente que podría arrastrarle a ello. Sigue viviendo en Bristol, con los amigos con los que se inició en el poker y cerca de la gente que conoció en la Universidad.

No oí hablar del poker hasta mi segundo año en la Universidad, estaba pasando tranquilamente el verano y lo vi en la televisión. Deposité 10 o 20 libras. Durante el primer año simplemente trasteaba por allí, jugando freerolls, abriendo una mesa…

El segundo año, el último en la Universidad, me uní a una sociedad de poker que organizaba un torneo todos los lunes por la noche. Allí había algunos jugadores de niveles medios. La sociedad me inspiró de alguna manera, me dí cuenta que había tipos ganando miles de libras y de que yo podría estar haciendo lo mismo.

A Millar le gusta jugar al fútbol de forma amateur, y su nick “Kanu7” proviene del parecido que hay entre su forma de jugar y la del internacional nigeriano Nwankwo Kanu: los dos son altos desgarbados, no muy ortodoxo con el balón en los pies, pero muy efectivo.

Su último hobby son las visitas al rockódromo. Según sus amigos, a Alexander no le lleva demasiado tiempo llevar al siguiente nivel sus habilidades cuando se interesa en algo y su carrera en el poker es un buen ejemplo de ello.

Hubo un momento en el que todo encajó y pasé de ser un jugador break even a ser un gran ganador. Fue como una bola de nieve. Me llevó como nueve meses pasar de jugar NL100 a NL5000.

Mi carrera se puede dividir en dos etapas: la primera trataba de ser competitivo y aprender como piensa el resto de la gente, y eso me llevó a NL5000. En la segunda todo eso pasó a un segundo plano y se trató de mejorar, de pensar sobre mis rangos, equilbrar de manera que no pudiera quedar expuesto a que nadie explotara mi juego.

Su amigo Simon fue el que le introdujo en la teoría del juego. Hablaron mucho sobre los conceptos recogidos en el libro “Mathematics of Poker” y , al principio, Millar no podía creer que hubiera un juego óptimo al que nadie pudiera ajustarse.

He conocido mucha gente, amigos míos, que con el tiempo, con los años, se han acabado hartando del poker. A mí no me ha pasado. Me encanta el poker, pero por sí mismo no es suficiente. Tiene que haber algo más, las ganas de mejorar, tener un objetivo, buscar la manera de hacer las cosas mejor de lo que las hacía antes.

Nunca he sido el número uno del mundo, nunca he llegado a pensar que tengo ventaja sobre cualquiera jugando heads-up, por ejemplo, y ahí tienes algo; siempre ha habido alguien al que intentar batir así que sigo mejorando mi juego para llegar a la cumbre y batir a los mejores jugadores.

Si miro atrás, a cuando empezaba, el poker era como encarar una montaña. Subir niveles se hacía más complicado a cada paso, el grupo de posibles rivales se hace menor, es como enfrentarte cada vez a una nueva cuesta. Llegar a la cumbre, dar el último paso debe hacerte sentir tan bien. Mirar atrás y poder decir que soy el mejor jugador que hay.