"Andypsx" roza el brazalete y se lleva más de 576.000 $

Las WSOP 2025 no han cumplido ni una semana y ya nos han dejado un puñado de historias memorables, entre ellas, las de dos españoles. 

Primero llegó la de Antonio Galiana y su segundo brazalete y ayer la de Alejandro Peinado "Andypsx" (con Galiana en el rail), que terminó subcampeón del Evento #11: 10.000 $ NLHE Mystery Bounty, embolsándose 486.192 $ en una brillante actuación que solo pudo frenar Yosef Fox, nuevo campeón y padre de otro ganador de brazalete: Jorden Fox.

El evento reunió a 616 jugadores y un prize pool de 5.728.800 $. La atención no solo estaba en el codiciado brazalete, sino también en las recompensas misteriosas, que ofrecían grandes recompensas por eliminación. La más grande de todas, de 250.000 $, permaneció sin reclamar hasta prácticamente el final.

Fox, jugador habitual de las WSOP desde 2007, fue quien finalmente la encontró: eliminó al británico Patrick Kennedy en quinta posición y sacó el bounty más grande, desatando gritos de euforia que se escucharon por todo el Horseshoe de Las Vegas. 

“Estoy un poco afónico de tanto gritar”, confesó después en una entrevista.

"Andypsx" había jugado un torneo formidable, volviendo a las WSOP tras muchos años alejado de los tapetes en los que ha dedicado su tiempo a las slots. Este año, sin embargo, se ha embarcado en la aventura que todo jugador de póker sueña con vivir algún día: jugar las WSOP.

Andy llegó hace apenas unos días y no ha tardado nada en lograr el que es el mejor resultado de su carrera. Después de disparar dos balas en un 5k, llegó el turno del Mystery Bounty, en el que fue el único español en alcanzar los premios. Tras alcanzar la mesa final con 85.000 $ en bounties y más de 170.000 $ asegurados, no se conformaba con eso e iba a luchar por su primer brazalete y el segundo de la armada este año.

Andy aguantó pacientemente los compases iniciales ante el dominio de Fox, que fue el encargado de la primera eliminación y, por ende, de abrir el sobre de 250.000 $. La cuarta posición fue para Richard Green, eliminado a manos de James Mendoza, que se las prometía muy felices, pero se topó con nuestro Andy.

El maño le ganó un flip para dejar servido el heads up contra Fox y abrió su único sobre de la mesa final, el cual no sabemos con certeza si fue de 5.000 $ o 10.000 $, pero poco importan 5.000 $ de diferencia con un premio total de prácticamente 600.000 $.

Fox empezó el cara a cara con una ventaja clara en fichas y pudo dominar con claridad ante Andy, que tras finalizar declaró en sus redes sociales que "Fox le runeó absolutamente todo". La mano final llegó con Andy jugándose el torneo con  Ad2d y Fox pagando con  JsJc. El board no trajo milagros y Andy veía como se le escapaba el sueño de conseguir el primer brazalete de su carrera.

El maño, no obstante, se marcha con más de 576.000 $ bajo el brazo entre premio y bounties y la sensación de haber vuelto al primer plano del póker mundial por la puerta grande, pero es que esto solo acaba de empezar y quedan muchos días por delante donde peleará en cada evento por poder llevarse el codiciado brazalete.

Y después de esto, ¿que viene? pues... la celebración, y conociendo a Andy... a un servidor le gustaría estar allí.

¿Su próximo torneo? Andy ha confirmado que jugará el $25k NLH 6-Handed High Roller, que cuidado, no es moco de pavo. 

Los Fox, se hacen un hueco junto a los Brunson

La historia de Yosef Fox también merece su propio capítulo. En 2019, su hijo Jorden Fox ganó un brazalete en un evento de 1.000 $ NLHE. Esta vez, fue Jorden quien miró desde la barandilla mientras su padre conquistaba su propio brazalete, con lo que cerraba el círculo. "Ahora le toca a él ganar el segundo", bromeó Yosef.

El bounty de 250.000 $ lo celebró en directo por FaceTime con su esposa y su nieto, que vieron desde casa cómo la fortuna cambiaba de manos. Y por si fuera poco, Yosef tiene otro hijo, Levi, con quien compartió mesa y cobro en el evento Tag Team de 2017. “Si Levi gana uno... seremos los nuevos Brunson”, dijo entre risas.

Resultados finales