Famosos

El regreso de “Timex” a lo más alto

Fran Medina | 31/08/12
El regreso de “Timex” a lo más alto
El canadiense ha vuelto a estar entre los mejores después de haberse retirado del poker durante un año.

En abril de 2010, el canadiense Mike McDonald “Timex” decidió retirarse del poker a sus 20 años, tras haber cosechado tres mesas finales en el European Poker Tour en apenas dos años, ganando una de ellas en 2008 en la que fue la primera mesa final de un jugador español en el EPT de la mano de Diego Pérez.

Durante un año, “Timex” estuvo viviendo la vida universitaria en Canadá, estudiando Dirección de Empresas.  A su regreso, “Timex” ha cosechado un buen número de éxitos, entre ellos una victoria en uno de los torneos de la difunta Epic Poker League y una burbuja de mesa final en el European Poker Tour de Madrid.

Los chicos de Global Poker Index han publicado una entrevista en la que el jugador canadiense revisa tu trayectoria de estos años, su decisión de retirarse y su nuevo enfoque en el poker. Ojo a las similitudes con la entrevista que publicábamos ayer con Jonathan Concepción “jonyctt”.

Sobre su decisión de retirarse.

En 2010 me senté para escribir mi entrada de blog mensual. No tenía un tema en mente en ese momento, pero cuando acabé de escribirla, me había retirado del poker. Me alegro de haber tomado aquella decisión. Podría haberlo hecho en privado pero quería que mis amigos y la gente que me leía entendiera lo que estaba pasando por mi cabeza.

Creo que, en aquel momento, tomé la decisión correcta. Hablaba con un amigo sobre esto hoy: cuando juegas a poker, tienes mucha libertad y muy poca orientación. Por un lado, yo ya no valoraba nada en mi vida; por otro, tenía ganas de descubrir cosas nuevas. Quería explorar, volver a estudiar. Cuando fui a la universidad por primera vez tenía 16 años. No fue una experiencia normal como universitario. Quería volver y vivirla. Lo hice y lo disfruté mucho. Hice buenos amigos y saqué buenas notas.

Pero no es lo mismo superar a otros veinteañeros en un examen de tu carrera que ser uno de los mejores del mundo en lo que haces. Creo que no valoraba eso de mi carrera como jugador de poker. Con todo el tiempo que había invertido en ello, me pareció un desperdicio no volver. Es difícil dedicarte tan profundamente a algo y no sentirse comprometido.

Sobre qué le motivó a volver.

No hubo un momento “eureka”. Sabía que iba a volver a Las Vegas a jugar las WSOP de 2011. Decidí quedarme en casa de Andrew Lichtenberger con otros seis amigos. Empecé a hablar de estrategia con gente que no conocía. Eso volvió a hacer que me sintiera hambriento. En ese momento era poco exigente con mi juego, y esas conversaciones me hicieron volver a pensar de forma crítica.

En otro orden de cosas no relacionadas con el poker, pasé un fin de semana de agosto el año pasado en el que hicimos un viaje por carretera doce amigos y yo a Montreal para una despedida de soltero. Fue lo que sueles esperar de una fiesta así, un rato divertido con los amigos. Durante ese fin de semana me di cuenta de que las responsabilidades que había adquirido me impedían poder organizar mi tiempo a mi manera. En el poker, podría haber hecho ese viaje cualquier fin de semana. Es algo que se me pasará, supongo, pero en ese momento sentí que, aunque el poker no te ofrece nada sustancial, no te pones barreras ni obstáculos. Eché de menos la libertad que ofrece la vida en el poker.

Sobre su nuevo enfoque.

Creo que tengo la cabeza más amueblada, soy capaz de percibir mi situación desde fuera y apreciar donde he llegado, de forma que lo valoro todo más. En muchas ocasiones te relacionas con gente del poker que tiene unas vidas increíbles pero no son felices. En realidad, el estilo de vida del jugador de poker es tan bueno o tan malo como tu quieras que sea. Si no te obsesionas con trabajar y te rodeas de la gente que te hace feliz estás viviendo una vida en la que te dedicas a jugar a un juego, viajas por el mundo y tú decides tus propios horarios.

Ahora mi mejor amigo vive en Canadá conmigo. Vamos al gimnasio cada día, salimos con un grupo de gente que tiene un estilo de vida completamente distinto, hacemos otras cosas más que grindar seis días a la semana. Muchos jugadores de hoy en día cometen los mismos errores que yo cometía hace unos años: no salir un viernes por la noche porque es mucho más rentable estar grindando.

Su nuevo método de trabajo.

Todo esto me ha hecho trabajar más duro y sentirme menos exitoso. Sé que hoy en día mi juego no es lo suficientemente bueno, pero el enfoque “si no está roto no lo arregles” tampoco lo es. Pienso en mi juego y creo que la mayoría de las cosas que hago están bien, pero al pensar que puedo ir mejorándolo todo constantemente voy puliéndome. Es un enfoque positivo que me ha ayudado a mejorar, aunque suene un poco contradictorio.

COMENTARIOS

Todavía no se ha realizado ningún comentario en esta noticia.