roadtopspc

César Esteban recogió el Platinum Pass y Gabriel Podovei el liderato

MrGhalys | 19/01/20
César Esteban recogió el Platinum Pass y Gabriel Podovei el liderato
El jugador de Barcelona logró imponerse en el Crazy Pineapple Challenge y se llevó el Platinum Pass de los clasificados online. El rumano fue capaz de cerrar su bolsa con el mejor stack del Día 2.

El Día 2 del PokerStars Road to PSPC Barcelona, que ayer sábado se disputó en las instalaciones de Casino Barcelona, nos dejó una de las jornadas más emocionantes y trepidantes que hemos vivido en mucho tiempo. Al ritmo habitual de un torneo se este nivel, se sumaron algunos elementos que lo convirtieron en algo realmente especial. 

Un total de 197 jugadores habían conseguido una plaza en esta jornada a través de los cinco días 1 disputados durante toda la semana, pero a ellos se sumaron otros 35 que elevaron el número total de participantes hasta las 613 entradas. De ellos, 72 iban a tener la oportunidad de entrar en el dinero para garantizarse, al menos, un premio de 750€. Sin embargo, en la mente de todos los supervivientes estaba la posibilidad de conseguir alzarse con el trofeo de campeón, que además llevará consigo una recompensa de 20.000€ y el preciado Platinum Pass que da acceso a su poseedor al Olimpo del PokerStars Players NL Holdem Championship 2020. 

Eso marcó los primeros niveles de juego. Los jugadores más cortos buscaban doblarse y los stacks más grandes consolidar su posición de fuerza. Eso se tradujo en eliminaciones a un lado y al otro de la poker room, en la que iban desapareciendo mesas al mismo ritmo que jugadores. Esa tendencia se mantuvo durante al menos dos horas, lo que hizo decrecer el field considerablemente, pero cuando llegó el primer descanso el tiempo se paró. La gente comenzó a arremolinarse en la sala Cotton de Casino Barcelona y entre el gentío hicieron acto de presencia los 25 clasificados online para esta parada, que uno por uno fueron tomando asiento donde les correspondía. 

Entre ellos estaba un jugador de Barcelona, de nombre César Esteban, que últimamente estaba un poco peleado con el poker, pero que al enterarse que el Road to PSPC llegaba a su ciudad no quiso perder la oportunidad de pelear por el Platinum Pass. Las cosas no le fueron mal en los satélites online y con la entrada en el bolsillo fue directo al día 1. Por desgracia, esa jornada no sirvió para que César se reconciliase con este maravilloso juego, pero todavía le quedaba la esperanza de que sonase la flauta en el Crazy Pineapple Challenge. Y sonó. Vaya si sonó. 

César fue capaz de superar la primera ronda y ya en la mesa final, con solo cinco jugadores, el run estuvo de su parte. De hecho, después de que todos los jugadores descartasen una carta en el flop y de que el dealer destapase el turn, César tenía la peor mano. Pero un cinco salvador apareció en el river. Un cinco que para él fue como el famoso cinco que permitió a Ramón Colillas ganar aquella mano crucial contra Julien Martini en el PSPC 2019. Un cinco que le daba escalera y por ende la mejor mano de toda la mesa. 

Así fue la acción, y la emoción, vivida en esa ronda de manos de Crazy Pineapple. 

 

A César le costó reaccionar. No terminaba de creerse que aquello le estuviese sucediendo a él. Algunos de sus conocidos celebraron su victoria dedicándole una sonora ovación mientras recogía el preciado Platinum Pass de manos de Guillermo Sanz y del propio Ramón Colillas. Después de eso, aún tuvo tiempo para atender nuestra petición de sentarse ante nuestras cámaras. 

Costó un poco más de lo previsto volver a la acción normal del torneo. Entre celebraciones, vídeos, entrevistas, fotos y demás, el tiempo se fue agotando y los supervivientes se fueron acercando peligrosamente a la fase de burbuja. Como suele suceder en estos casos, por un lado estaban los que trataron de aprovechar más esa fase y por otro los que no pudieron sacarle tanto provecho. Entre los primeros se hizo grande la figura del Team Pro de PokerStars Ramón Colillas, que por aquel entonces navegaba con el segundo mejor stack de su mesa. Ramón le puso un punto más de agresividad a su juego y comenzó a someter a sus vecinos de asiento, aunque pronto se topó con una barricada. De hecho, fue mucho antes de lo que esperaba. 

Las ciegas habían subido a 5.000/10.000 y big blind ante de 10.000 y el field se había reducido ya a 73 jugadores cuando, en mesa televisada, Jordi Escriba decidió abrir una mano y se encontró con el call con posición de Sophie Satouri, que por aquel entonces manejaba una pila de fichas de 447.000 puntos. Después de eso llegó el turno de Ramón, que con 361.000 puntos y  kh th decidía moverse all in. El resto de la mesa foldeó y la acción volvió a Escriba, que no tardó en desaparecer de la ecuación, pero Satouri tenía otros planes. La francesa anunció call y le bajó al Team PokerStars Pro un  ad 5d que sorprendió a propios y extraños. 

Sea como fuere, la jugadora francesa iba por delante. Y por delante terminó la mano. El dealer destapó un board que mostró  7c ah 9d en el flop y el turn trajo un  8h que dio unos outs extra a Colillas. Lo raro fue que el river trajese un  8c, una carta que además de hacerle perder la mano convertía a Ramón en el hombre burbuja de este Road to PSPC Barcelona. 

 

Lo que vino después fue un clásico de las fases post burbuja. Una vez más las eliminaciones se aceleraron y el field comenzó a decrecer a marchas forzadas. Por el camino se fueron quedando jugadores como Idris Mohamed, Gerad Colomer, David Valle, Marc Acosta, Oliver Méndez, Álex Martin, Teresa Purti, Axel Torrents o Isabel Zapatería, que partieron con un premio debajo del brazo que mitigó el dolor de su eliminación. 

Mientras ellos y muchos otros fueron cogiendo el camino del rail, otros iban subiendo en la lista de los mejores stacks. Por ahí fueron apareciendo nombres como los de Adán Soler (905.000), Daniel Fulgescu (1.205.000), Jesper Hansen (1.230.000) o Juan González (1.355.000), aunque ninguno de ellos logró cerrar su bolsa con el mejor de los stacks. 

Ese privilegio estaba reservado para el genio y figura de los torneos de Casino Barcelona, el único e inconfundible Gabriel Podovei. Salvo en un par de ocasiones, Podovei contó con un stack más que saludable durante toda la jornada y eso le dio pie a desplegar su mejor juego. Ganando un bote allí y otro allá, fue su presencia en la mesa televisada durante la fase final del día lo que le llevó al frente de los conteos. El rumano cerró su bolsa con 1.775.000 puntos, lejos de su inmediato perseguidor, el jugador de Barcelona Oriol Vidal (1.565.000). Ambos fueron los únicos que lograron superar la barrera de los 1,5 millones. Pablo Beltrán se quedó cerca, pero terminó la jornada con 1.485.000, que tampoco está nada mal. 

Los 23 supervivientes volverán a la acción a partir de las 16:30 del domingo, un día de juego que no se detendrá hasta que conozcamos el rosto del jugador que se lleva el último Platinum Pass que se va a repartir en esta parada. Como ya ocurriera ayer, además del seguimiento en directo que vamos a realizar en esta casa, la jornada se podrá seguir a través de la retransmisión en directo, y con cartas vistas, vía Twitch. 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

COMENTARIOS

Todavía no se ha realizado ningún comentario en esta noticia.