Joe McKeehen cumple el guión y sigue imparable hacia el título

Anoche comenzaba en Las Vegas, en el Penn & Teller Theatre del Rio una de las citas más esperadas del año, sino la que más: el November Nine de las WSOP.

Como en cada curso, los nueve finalistas del torneo más importante del mundo volvían a reencontrarse casi cuatro meses después de que la mesa final quedara formada. Entre todos ellos, una figura sobresalía por encima de la del resto: Joe McKeehen volvía con la vitola de favorito, tanto por juego como por la ventaja en fichas que gozaba respecto a sus rivales.

De esta forma daría comienzo la mesa final:

La primera eliminación no se hizo esperar, de hecho solo se demoró dos manos, la que hizo falta para que el botón llegara a McKeehen que ponía all-in a sus dos rivales más cortos en las ciegas. Chan con  KsQc decidía pagar viéndose por detrás del líder que presentaba  Ad4h. Nada del board ayudaba a Patrick Chan quien caía en novena posición y se convertía en el November Nine más fugaz de la historia. 

A partir de ese momento, asistimos a una gran demostración de cómo no actuar en una mesa final de este calibre. El gran protagonista de esta película de miedo fue Zvi Stern, quien se tomaba todas y cada una de sus decisiones con una parsimonia impropia de una cita como esta. Esto provocó que el ritmo se viera extremadamente relentizado, algo que obligó a la organización de las WSOP a modificar el “planning” previsto.

En un principio, la acción debía comenzar con nueve aspirantes y no parar hasta que quedaran solo cuatro, sin embargo, dado el poco número de manos que se jugaron a lo largo de la primera jornada (72 en casi 6 horas de juego), la organización decidió para cuando todavía quedaban seis aspirantes en pie. 

Joe McKeehen fue el encargado de cargarse a los tres eliminados de hoy. Después de dar cuenta de Patrick Chan, le llegó el turno a Butteroni, el otro short-stack de la mesa quien se fue “blindeando” poco a poco hasta encontrar una mano con la que ir all-in, con la mala fortuna de verse dominado por el líder. Cuando al italiano le quedaban solo 3.000.000 de puntos, iba all-in con  AhJc topándose con el  AsKs del americano. 

La mesa se quedaban con siete aspirantes. McKeehen dominando, Neil Blummenfield sorprendiendo con un estilo de juego mucho más agresivo de lo que estaba previsto, Stern desquiziando con sus excesivos tankeos aunque ganando algunos puntos, y Neuville perdiendo progresivamente casi todos sus puntos a base de no ganar una sola mano de las que decidió jugar.

Esto provocó que el belga pasara al modo “push-fold” mucho antes de lo que le hubiera gustado. En una de estas, ya muy corto en puntos, recibía  AcJc y se restaba ante el enésimo “open-raise” de McKeehen que tenía  Jh6h. El americano, obligado a pagar el resto del belga, parecía que doblaría el más veterano de la mesa, sin embargo un board  QdTd3hQhTh acabó eliminando a Pierre Neuville en séptima posición.

Con esta eliminación se puso final a la primera de las tres jornadas de las que se compondrá esta mesa final. Los stacks quedaron de la siguiente manera:

Esta madrugada, la acción se reanudará cuando en España sea la 1:30h de la madrugada y no parará hasta que solo queden tres aspirantes (otro cambio de planes sobre lo previsto).