Ley del Juego

¿Y si las grandes salas no operan en España?

Jairo Moreno | 11/05/12
A tres semanas de la concesión de licencias de juego se abren un montón de interrogantes a raíz de los impuestos que les estaría exigiendo la Agencia Tributaria a los operadores online.

El 1 de junio la Dirección General de Ordenación del Juego concederá las primeras licencias de explotación del juego online para los operadores que lo han solicitado pero la pregunta a día de hoy es, ¿quién obtendrá esas licencias?

Desde hace unas semanas, algunas de las más importantes empresas que han estado operando en España hasta el momento han estado siendo investigadas por la Oficina Nacional de Investigación contra el Fraude para dilucidar las cantidades que estas deberían devengar a la Agencia Tributaria por los ejercicios de los cuatro años anteriores.

Desde que se aprobó la ley del juego del 27 de marzo, las empresas con intención de solicitar licencia en el mercado español han estado abonando los correspondientes impuestos como se les ha exigido. Sin embargo, el cambio de gobierno y de dirección al frente de Ordenación del Juego ha supuesto un giro en la consideración de los impuestos que estas empresas deben abonar para poder conseguir una licencia en España.

La dificultad para estimar la base imponible a devengar por los servicios prestados a usuarios españoles durante los cuatro años anteriores a la ley no ha sido obstáculo para que la Agencia Tributaria haya hecho sus números y haya puesto cantidades sobre la mesa de algunas de las más importantes empresas del sector como podrían ser PokerStars, bwin.party, Miapuesta o Bet365, tal y como apunta esta mañana el diario económico Cinco Días. Y las cifras de las que se está hablando no son pequeñas precisamente.

Llegados a este punto, estas grandes empresas podrían estar planteándose renunciar al mercado español si esas exigencias tributarias se requieren inflexiblemente y exceden lo económicamente viable.

La presión que desde el sector del juego tradicional se ha venido ejerciendo desde el relevo en la DGOJ parece que está surtiendo efecto y, a día de hoy, son muchas las incertidumbres sobre qué empresas operaran cuando se dé el pistoletazo de salida el 1 de junio.

Las próximas tres semanas van a ser claves para dibujar el escenario del juego online en España.

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